Desde la campaña advertimos que difícilmente se iba a echar abajo el contrato celebrado, entre la empresa Concesiones Integrales, “Agua de Puebla” y el gobierno del estado hace 11 años, debido a los candados establecidos en el papel, en donde la empresa, propiedad de la familia, Hank “Grupo Caliente”, tiene como ventajas.
La recesión de dicho contrato firmado por la administración de Rafael Moreno Valle, implica que el gobierno, la nueva administración de Alejandro Armenta, tuviera que cubrir una indemnización por poco más de 8 mil millones de pesos, alrededor de 400 millones de dólares, a favor de la empresa.
Todo esto viene a colación porque el próximo miércoles a instancias de la diputada priista, Delfina Pozos, los representantes de “Agua de Puebla”, deberán de comparecer ante el Congreso local, para explicar una vez más, el manejo de la concesión y sus efectos, lo que se antoja como un simple acto de protocolo.
Que nadie se haga ilusiones, para que no haya desilusionados, reitero desde la pasada campaña se dijo, es casi materialmente imposible echar abajo el título de concesión a 30 años, avalado por el Congreso local en 2013, por las implicaciones económicas que tendría para el primer año de operaciones de la nueva administración estatal.
¿Qué si se puede hacer? Obligar a la empresa a mejorar la prestación del servicio, el cual se puede calificar de regular a bueno, aunque se necesita que se concreten la mayor parte de las inversiones programadas, para mejorar la distribución del agua en la mancha urbana de la ciudad de Puebla.
El tema de quitarle la concesión a “Agua de Puebla” por parte de los candidatos de la 4T ha resultados ser electoralmente lucrativo en campaña, pero en los hechos y se les dijo, es inviable, por lo que representa económicamente, además de que implicaría un pleito legal, de grandes proporciones para el gobierno y en donde los principales afectados en lo que se resuelve serían los ciudadanos.
Si bien es cierto es interesante la comparecencia de los funcionario de Agua de Puebla y del Soapap ante comisiones en el Congreso local y puede considerarse como un punto a favor de los legisladores, lo cierto es que también, en muy poco van a cambiar las cosas.
Miente el tesorero municipal del Ayuntamiento de Puebla. En los recientes días, el tesorero de la administración municipal, Héctor Romay, declaró que la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) es una de las dependencias afectadas por la falta de liquidez del ayuntamiento lo que afecta gravemente la operatividad de la plataforma de cámaras de video vigilancia; sin embargo, resulta que contrario a esa versión la entonces titular de esa dependencia Consuelo Cruz, sí dejó desde el mes de julio el dinero presupuestado para la continuidad de la video vigilancia y de otros programas.
De acuerdo a fuentes de la Tesorería Municipal, el presupuesto de casi cinco millones de pesos, consta en el documento que en su momento la subsecretaría administrativa de la SSC hizo llegar a la esa dependencia para cubrir el contrato con la empresa encargada de la video vigilancia hasta el 15 de octubre.
La administración anterior, desde el año 2023 cuando proyectó su presupuesto anual 2024, siempre consideró los dos meses y medio de operación para la administración entrante.
Tal parece que desde la SSC quieren utilizar el tema financiero para justificar la ola de violencia que está creciendo en la ciudad.
Tan es así que ya el propio edil capitalino, ya salió a reconocer que sí están funcionando las cámaras de seguridad en Puebla capital.
PAN con lo mismo. Todo parece indicar Jorge Romero se alzará con el triunfo en la interna por la dirigencia nacional del PAN, lo cual augura que se va a mantener las mismas formas de actuar y los privilegios para un solo grupo, tal y como ocurrió con el michoacano, Marko Cortés y con el queretano, Ricardo Anaya.
Estos tres personajes son prácticamente lo mismo, poco o nada va a cambiar en Acción Nacional.
De la misma forma, en Puebla, todo parece indicar que el grupo hegemónico, el del ex edil capitalino, Eduardo Rivera Pérez, mantendrá el control de este instituto político, al elegirse como el método de selección para la nueva dirigencia en Puebla, el consejo político estatal.
Rivera y su grupo, controlan al menos unos 60 consejeros dentro de este organismo, sería una auténtica sorpresa, si alguno de los demás aspirantes, le logra arrebatar el control del PAN en Puebla.
Le sangro la boca a Noroña. Uno de los personajes más repugnantes de la 4T, el senador Gerardo Fernández Noroña, estuvo ayer en Puebla para encabezar una reunión con la militancia de este partido, a un año de que Alejandro Armenta, ganó la candidatura a la gubernatura de Puebla.
Como parte de su discurso, Noroña arremetió en contra del ex gobernador, Rafael Moreno Valle, de quien dijo que, si estuviera vivo, ya lo hubieran sacado de Puebla.
Noroña parece ignorar que el “morenovallismo” está más vivo que nunca e incrustado en Morena, tanto en el gobierno del estado como en el ayuntamiento de Puebla.
Al parecer Noroña ignora la situación geopolítica de Puebla y conformación de los grupos locales o quizá lo haya dicho con toda la intención del mundo. A mí me pareció ignorancia.