En tercer viaje inolvidable, cientos de estudiantes disfrutan de tesoros de Puebla

-En tres fines de semana, mil 200 jóvenes se han beneficiado con el Programa Turismo Comunitario impulsado por el gobierno de Alejandro Armenta.

Desde su inicio, el pasado 22 de marzo, el programa “Viaje Inolvidable” ha llevado a mil 200 alumnos de secundaria a explorar los rincones más emblemáticos de Puebla, una experiencia educativa que busca fomentar el sentido de pertenencia de las y los jóvenes con su tierra y cultura.

El programa, impulsado por el gobierno que encabeza Alejandro Armenta, ha logrado conectar a las y los estudiantes con los destinos turísticos más significativos del estado, contribuyendo a la reconstrucción del tejido social.

María Del Socorro Bermúdez López, trabajadora social de la Escuela Secundaria Técnica 56, expresó su agradecimiento: “Es un honor que el gobierno haya organizado este viaje para los mejores alumnos. Ha sido una experiencia verdaderamente inolvidable. Muchas gracias por esta oportunidad”.

Por su parte, Emmanuel Alonso, representante de la Técnica 75, comentó: “Venimos desde Tepeaca, Puebla, y queremos agradecer profundamente a la Secretaría de Turismo y al Gobierno del Estado, así como a nuestro gobernador, por brindarnos la oportunidad de vivir esta experiencia en el Acuario Michin con nuestros estudiantes. Esta actividad ha sido invaluable. Invitamos a otras escuelas a acercarse a la Secretaría, realizar los trámites correspondientes y permitir que sus alumnos también disfruten de momentos increíbles”.

Estás acciones tienen como principal objetivo promover el turismo como una herramienta educativa y social, al brindar a las y los jóvenes la oportunidad de conocer, valorar y compartir la riqueza cultural, histórica y natural del estado.

En cada uno de los viajes, los alumnos tienen la oportunidad de conocer lugares históricos, culturales y naturales que les permiten conectar con su patrimonio y tradiciones. Algunos de los destinos más destacados que los jóvenes han visitado en este tercer viaje inolvidable:
-Escuela Secundaria Técnica 102, Acatzingo: Los estudiantes visitaron su propio municipio, donde pudieron disfrutar del Centro Histórico, el Ex Convento Franciscano, y el Parque Eco Turístico en Ranchería Hernández, entre otros atractivos. Fue una experiencia que les permitió redescubrir su ciudad y sentir un mayor vínculo con su entorno.
-Escuela Secundaria Técnica 67, Guadalupe Victoria: Este grupo viajó a lugares como el Palacio Municipal y las Lagunas de San Luis Atexcac y La Preciosa, apreciando la belleza natural y cultural de su región.
-Escuela Secundaria Técnica 56, Santa Rita Tlahuapan: Los jóvenes exploraron sitios como el Truchero Ejidal San Juan Cuauhtémoc y el Taller de Esencias de los Volcanes, experimentando el mestizaje cultural y las tradiciones de su comunidad.
-Escuela Secundaria Técnica 141, de Tepeaca: realizaron un recorrido por el Centro Histórico, el Museo Casa de Cortés y el Ex Convento Franciscano, mostrando la historia y la arquitectura colonial de este emblemático municipio.
-Escuela Secundaria Técnica 116, San Gregorio Atzompa: Los alumnos pudieron recorrer el Museo de Migración Italiana en Chipilo y otros puntos de interés que revelan la rica historia migratoria y cultural de la región.

Además de estos viajes, otros grupos visitaron lugares emblemáticos en la ciudad de Puebla, como el Museo San Pedro, la Biblioteca Palafoxiana, el Museo de La Constancia y el Acuario Michin, en una experiencia que los conectó con el presente y el pasado de la capital del estado.

Este programa no solo ofrece un recorrido por los sitios más representativos de Puebla, sino que también fomenta la integración social y el aprecio por la historia y cultura local, generando una mayor identidad y sentido de pertenencia en los jóvenes poblanos. Cada viaje es una invitación a pensar en grande, a soñar con un futuro lleno de posibilidades, pero también a valorar el legado cultural y natural que Puebla tiene para ofrecer.

El “Viaje Inolvidable” es una prueba de que el turismo no solo es una actividad recreativa, sino una poderosa herramienta educativa que puede cambiar la forma en que los jóvenes perciben su entorno y, sobre todo, les permite soñar con un futuro mejor y más conectado con su tierra.

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