Isaac Palestina
@IsaacPalestinaD
Las reformas políticas que se desarrollaron desde 1977 al régimen político mexicano consolidaron un régimen pluripartidista de 3 institutos predominantes. Paulatinamente, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) perdió su hegemonía, primero en gubernaturas, luego en alcaldías urbanas y finalmente en 1997 en la Cámara de Diputados. De hecho, desde 1997 ningún partido había logrado la mayoría que Morena obtuvo en 2018 y que reafirmó en 2021, y ahora en un escenario inaudito en 2024 morena y su coalición lograron una victoria en más de 250 distritos federales.
México cuenta con dos principios para asignar a los 500 diputados federales, el tradicional es el de mayoría relativa (300), es decir, los distritos que en elecciones abiertas ganan los partidos políticos, y los diputados asignados por el principio de representación proporcional, mejor conocidos como “plurinominales” (200). Este último principio fue pensado para darle representatividad a los partidos más pequeños que no lograron ganar las elecciones.
Morena y sus aliados ganaron en todos los distritos de 17 estados y todas las senadurías en 30 entidades, es decir, Morena arrasó por el principio de mayoría relativa y eso la hace la fuerza con más representatividad. Sin embargo, un problema leguleyo es que los aliados de Morena se beneficiaron de la marca e incluso más que hacer campaña por sus propias siglas, utilizaron las de Morena para promoverse, de ahí que aunque el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y el Partido del Trabajo (PT) ganaron menos distritos que Morena, pero más que el PAN, tendrán derecho a la asignación de más diputados plurinominales, lo que acerca a la coalición obradorista a arrebatar los 334 diputados y con ello obtener la mayoría calificada.
El tan citado concepto de sobrerrepresentación legislativa hace referencia a la disparidad dentro de la asignación de diputados por ambos principios. El problema leguleyo que la oposición no quiso remediar en la anterior discusión de la Reforma Política que propuso el presidente Andrés Manuel López Obrador es el mismo por el que ahora se rompen las vestiduras, mismo que indica que ningún partido político puede contar con más de 300 diputado por ambos principios o con un número de diputados que representen un porcentaje del total de la Cámara que exceda en 8 puntos a su porcentaje de votación nacional emitida, supuestos que Morena por sí solo no cumple, aunque por el nivel de votación de sus aliados, morena rebasará, es cierto.
En 22 de las legislaturas locales, entre ellas Puebla, se encuentra la misma discusión, es decir, si Morena y sus aliados deberían tener asignación de plurinominales, y dependiente de la legislación local, en algunos estados Morena será una fuerza predominante y en otros se equilibrará, de cualquier forma lo que no debe perderse de vista es que en México la política está desempeñándose en dos grandes alianzas parecidas a un bipartidismo, lo que hace inoperante el principio de sobrerrepresentación, pensado para un sistema de tres partidos.