Alma Méndez
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En la Facultad de Comunicación de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) se llevó a cabo la Tercera Asamblea entre directivos y estudiantes con el objetivo de atender las demandas del alumnado. Uno de los temas principales abordados fue la violencia de género dentro de la institución.
Durante la reunión, representantes de la facultad propusieron la creación de una comisión estudiantil que participe en la revisión y mejora del protocolo de actuación ante denuncias de violencia de género. Además, reiteraron la existencia de un canal directo para presentar denuncias, gestionado por la Rectora, el cual permitirá que los casos sean remitidos directamente a la Defensoría de los Derechos Universitarios sin intermediarios, con el fin de agilizar la respuesta y atención. El correo habilitado para este propósito es: .
Destacó la importancia de garantizar los derechos tanto de quienes denuncian como de las personas señaladas, recordando que las acusaciones deben pasar por un proceso de investigación antes de determinar responsabilidades. La rectora expresó su preocupación por estas problemáticas y su compromiso con la comunidad estudiantil, señalando que, a través de las mesas de trabajo, se han identificado diversas áreas de mejora en la atención a estos casos.
Como parte de las acciones emprendidas, la rectora anunció en el Consejo Universitario la eliminación de ciertos trámites burocráticos que dificultaban la atención a las denuncias. “A partir de ahora, cualquier persona que se sienta víctima de violencia podrá presentar su denuncia directamente ante la rectora, quien la canalizará a la Defensoría de los Derechos Universitarios para su seguimiento”, se mencionó.
Para concluir, se solicitó la conformación de un comité de tres representantes de la comunidad estudiantil de la Facultad de Ciencias de la Comunicación. Este comité tendrá la tarea de supervisar el cumplimiento de las normativas existentes para la protección de los derechos de los estudiantes, con especial énfasis en garantizar la integridad física y moral de la comunidad universitaria.